Los 3 filtros de Socrates: verdad, bondad y utilidad, a photo by rutroncal on Flickr.
Hoy Domingo, día de reflexión... y hoy me ha parecido apropiado recordar "Los 3 filtros de Sócrates" pero de una manera diferente... y como aparece la imagen los 3 elementos nos han de servir para recordar esos tres filtros a modo de símbolos: Verdad (el metro), Bondad (el pompón) y la Utilidad (la llave inglesa).
Es una regla que sobre todo a los que somos visuales (enfoque de uno de los sistemas de representación de PNL- programación neurolingüística- que explicaré en otro post), o a los que tenemos memoria fotográfica,... es decir, utilizar imágenes que nos sirvan para recordar conceptos.
En este caso, Sócrates planteó estos 3 filtros para evitar la rumorología y hacer entender a sus discípulos la importancia y las consecuencias que tiene el hablar de algo y/o alguien sin tenerlas en cuenta.
La historia de "Los 3 filtros de Sócrates" dice así:
En la antigua Grecia, Sócrates fue famoso por la práctica de su conocimiento, con alto respeto. Un día un conocido se encontró con el gran filósofo y le dijo:
¿Sabes lo que escuché acerca de tu amigo?
Espera un minuto, replicó Sócrates. Antes de decirme cualquier cosa querría que pasaras un pequeño examen. Es llamado el examen del triple filtro.
¿Triple filtro?
Correcto, continuó Sócrates. Antes de que me hables sobre mi amigo, puede ser una buena idea tomar un momento y filtrar lo que vas a decir. Es por eso que lo llamo el examen del triple filtro.
El primer filtro es la verdad: ¿estás absolutamente seguro de que lo que vas a decirme es cierto?
No, dijo el hombre, realmente sólo escuché sobre eso y...
... Muy bien, dijo Sócrates. ¡Entonces realmente no sabes si es cierto o no!
Ahora permíteme aplicar el segundo filtro, el filtro de la bondad: ¿es algo bueno lo que vas a decirme de mi amigo?
No, por el contrario...
Entonces, continuó Sócrates, tú deseas decirme algo malo sobre él, pero no estás seguro de que sea cierto. Tú puedes aún pasar el examen, porque queda un filtro; el filtro de la utilidad: ¿será útil para mí lo que vas a decirme de mi amigo?
No, realmente no.
Bien, concluyó Sócrates. Si lo que deseas decirme no es cierto ni bueno e incluso no es útil, ¿por qué decírmelo?
Y ahora bien ¿tú tienes en cuenta estos 3 filtros antes de hablar de algo y/o de alguien?
Hola Rut! Un post muy bueno, y en la actualidad que vivimos más interesante aún. Estamos rodeados de rumores sin fundamento y lo triste es que la gente no se plantea la verdad o no de ese rumor, lo más fácil es creerselo y difundirlo sin más....Me ha encantado este cuento, cuanta gente debería leerlo!!! Porque todos alguna vez hemos caido en no hacer los 3 filtros ante una habladuría...
ResponderEliminarUn beso
Hola Ruth, me ha encantado tu post, no había leído nunca antes este "cuento", la verdad es que te invita a reflexionar, por que ¿quién no ha participado alguna vez en un rumor? Sin duda, la próxima vez que me cuenten un "chisme" o vaya yo a contarlo, me acordaré de los "tres filtros". Un beso.
ResponderEliminarHola! Bluepupila y Eva María!! muchísimas gracias por vuestros comentarios. Lo de los tres filtros es algo que nos deberíamos aplicar tanto a nivel personal como profesional, no sólo a los que nos hablan, sino también a nosotr@s mism@s... yo misma me lo recuerdo de vez en cuando...
ResponderEliminarUn beso para cada una!! :)