viernes, 31 de diciembre de 2010

Último día del año


El último día del 2010 ha llegado, parece mentira cómo pasa el tiempo de rápido o cómo lo percibe cada un@ cuando llega este día...

Queramos o no, en este día, independientemente de que lo celebremos o no, lo pasemos con amigos o en familia, en algún lugar diferente o en nuestras respectivas casas... tomemos uvas, gominolas, lacasitos,... a las 00:00 h se produce un cambio de chip.

Psicológicamente nos marcamos un antes y un después, nos encontramos ante un nuevo tablero, en la casilla de salida... nos llenamos de esperanza y elaboramos nuestros deseos (además de los ya más que conocidos: dejar de fumar, adelgazar, ir al gimnasio, etc...)

Ojalá esa esperanza que nos llena de energía y de ánimo para ir elaborando ese listado de deseos, no nos abandone el día 15 de Enero sino que seamos capaces de alimentarla cada día de este nuevo año que estrenamos para que seamos nosotros y no la suerte los que decidamos que esos deseos se conviertan en realidad.

Feliz Año 2011 a tod@s

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Amigo invisible hecho a mano...


Bueno!!, la verdad es que el anterior post sobre el amigo invisible ha generado comentarios... sobre todo desde mi propia oficina!! ;)

Por eso, y para dar ideas y sugerencias sobre cómo generar la empatía, el buen clima, el cooperativismo y el mayor conocimiento y relación entre los miembros de un equipo quiero tratar de especificar cómo debe de ser el "verdadero regalo" del amigo invisible.

La sugerencia es la siguiente, para que no terminen comprando los amigos invisibles las respectivas parejas, o compremos un regalo sin mirar el precio simplemente porque no nos apetece buscar más... la idea es que podamos fabricar nosotros mismos el regalo de nuestro amigo invisible. Para este tipo de regalos vale cualquier cosa, siempre y cuando conectemos con el que es nuestro "regalado" y que hagamos algo que pueda tocar la fibra sensible o nos acerque un poquico más a esa persona.

Ideas: un bizcocho, un CD de música escogiendo las canciones, una poesía / relato / canción, un mini-album de fotos, ... lo que se nos ocurra.

¿Nos ocupa más tiempo? sí ¿nos dará más satisfacción el ver la cara del susodich@ cuando abra el regalo? seguro que sí...

La creatividad es gratis y las ganas de acercarse a los demás y crear equipo... también...

Que se preparen mis compis para el "amigo invisible" 2011 jejeje

domingo, 19 de diciembre de 2010

Amigo Invisible, sí o no?


Llegan las Navidades y como en casi todas las organizaciones comienzan también los diferentes eventos más o menos formales en los que se tiene oportunidad de "ver" algo más de los compañeros en otro ámbito que no sea el del entorno propio de trabajo.

Una de las actividades más recurrentes es la del Amigo Invisible que suele ser promovida por uno o dos de la empresa o del departamento en cuestión y aceptado y asumido por los demás.

Es posible que más de uno que esté leyendo este post al mismo tiempo esté pensando: "madre mía, otra con lo del amigo invisible", "pues si nadie quiere comprar regalos", "¿y si te toca alguien que te cae mal?", "uff, no tengo tiempo",... o cosas peores....

En esta ocasión, yo reconozco que soy la que organiza el amigo invisible, y quiero dar mi visión de porqué me parece un evento que no se debe perder. ¿Por qué?

Porque en el trabajo, aunque nos guste y se trate de fomentar el trabajo en equipo, tendemos a ser individualistas, nos falta tiempo, y en épocas de estrés o de tensión el ambiente de trabajo suele ser el primer perjudicado...

Desde mi punto de vista, el "amigo invisible" nos sirve para obligarnos a pensar en alguien que no sea uno mismo e incluso tratar de empatizar con alguien que incluso no es afín a ti. Es un esfuerzo, de todos, es pensar en la otra persona, en qué es lo que le gusta o le puede gustar, en ahondar, en tratar de conocerla o acercarte a lo que le gusta... y todo por 10, 12, 15 o hasta 20 euros. Si todos hacemos ese esfuerzo, conseguimos un acercamiento significativo entre todos y cada uno de los que conforman el grupo, pudiendo encontrarnos con un regalo estupendo que es el compartir algo que no sean los sabores y sinsabores de los días de trabajo.

Para mí, es un momento especial el poder hacer un regalo desde una perspectiva anónima tratando de dejar una impronta personal que refleje que se ha puesto cariño al comprar ese detalle,... por que no lo olvidemos... es un detalle...

En la fotografía, gracias a la aplicación de www.wordle.net he tratado de reflejar todas las palabras que para mi representan el "amigo invisible".
¿Y para tí que representa?

martes, 14 de diciembre de 2010

Confía en tí mismo y sé positivo, así lograrás tu meta


Hace poco, cayó en mis manos un cuentecico que me gustaría compartir. Es un relato que nos hace reflexionar sobre como en muchas ocasiones nuestros esfuerzos, ilusiones, nuestra capacidad para mantenernos en una línea o hacia la búsqueda de una meta se ven influenciadas por lo que nuestro entorno opine o diga.


Una de las cosas que nos tenemos que mentalizar a lo largo de nuestra vida, es que no todo lo que hagamos ni le va ni le ha de parecer bien a todo el mundo. Si queremos que nuestras acciones sean resultado de la opinión que la gente tenga de ellas... no avanzaríamos. Tenemos que tener más fé en nosotros mismos y tenemos que "educar" a los que nos rodean a que podemos pedir consejo, pero eso no tiene porque significar que el que yo pida ayuda o asesoramiento me obligue a hacer lo que me has aconsejado. Como dice Covey, será mi elección.


El cuento dice así:

"Un grupo de sapitos se reunió para intentar el mayor desafío de sus vidas, alcanzar la cima más alta de la comarca.

Los hombres que convivían con ellos no cesaron de decirles que su objetivo era imposible, y siguieron insistiendo mientras tenía lugar la carrera.

Muchos sapitos fueron abandonando, agobiados y desanimados por los negativos comentarios de la gente agolpada a su alrededro, que seguía repitiéndoles que no lo podrían conseguir.

Sin embargo, un sapito seguía a su marcha, ajeno a tanta opinión negativa, y al fin, ante la sorpresa de todos, logró en solitario alcanzar su cima.

Todos querían saber cómo lo había conseguido y pudieron averiguar que el sapito era sordo, que fue el único que no escuchó los veredictos y los prejuicios que habían hecho renunciar a los demás."

Confía en tí mismo, sé positivo y lucha por lo que deseas, sólo así podrás mantener el esfuerzo para no parar hasta conseguir lo que pretendas.

¿Y tú? ¿qué sapito eres?

sábado, 11 de diciembre de 2010

Empatía y Asertividad: palabras frecuentes, los hechos... no tanto

Últimamente, tanto en las entrevistas que hago como en los cursos que imparto, la gente presume de ser asertiva y/ o con empatía.

Parece ser que todo el mundo se ha concienciado que ser empátic@ y ser asertiv@ "vende", que es lo que todos queremos oír, sobre todo si estamos hablando de procesos de selección, y encuentran la manera de destacarlo de alguna manera a lo largo de la entrevista.

Lo más absurdo del asunto, es que ya me he encontrado en más de una situación, en la que el candidat@ en cuestión acaba de destacar su capacidad de conectar y empatizar con todo el mundo así como su capacidad de escucha y no se da cuenta de que lleva 30 minutos hablando sin parar y sin visos de dejar de hacerlo. Su comportamiento demuestra la verdadera realidad.

En primer lugar hay que diferenciar la asertividad de la empatía. Son dos habilidades relacionales que serán efectivas profesionalmente en función del puesto que tengamos que desempeñar. Por regla general, la asertividad será un tipo de comportamiento deseable en cualquier tipo de posición y sin embargo el ser excesivamente empático no será conveniente en ciertos puestos (lo que no quiere decir que no valoremos la estabilidad emocional y/o madurez).

La asertividad, es el tipo de comportamiento que aprendemos a adoptar gracias a las relaciones sociales. Es la forma efectiva de interrelacionarnos facilitando la comunicación transparente, el respeto mutuo, la autoconfianza, la educación, la escucha, la firmeza sin imposición, etc... en realidad, si nuestra profesión exige que estemos en contacto con las personas de forma constante, aunque no conozcamos la palabra... seguramente seamos tendentes a ser asertivos. ¿Por qué? porque todo el mundo sabe cómo se debe comportar con la gente (el famoso "no hagas lo que no te gustaría que te hicieran a tí y trata a la gente como te tratarías a tí mismo")

La empatía es un proceso de conexión interpersonal más complejo, porque no sólo conlleva la comunicación entre dos personas, sino significa conocer las emociones de nuestro interlocutor y sentir lo que está sintiendo en una situación en concreto. Es por esto mismo, que en determinadas posiciones no sea conveniente ser excesivamente empático si eso de alguna forma va a afectar a la objetividad de nuestra toma de decisiones. Hemos de asumir, que empatizar, significa comprender, no aceptar.

Bien, la conclusión a la que me gustaría llegar, es que para trabajar la asertividad y la empatía, como primer pilar ha de existir la honestidad, el ser íntegro y coherente. Tanto si hacemos una entrevista como si estamos en un proceso de coaching eso es lo más importante. No presumamos de algo que no somos cuando los hechos, nuestros comportamientos son contrarios a lo que presumimos ser.
Foto sacada de elgatomenta en flickr

miércoles, 1 de diciembre de 2010

El arte de enseñar


Cuando te dedicas a dar formación, uno de los principales objetivos que se ha de proponer el formador es precisamente ser un facilitador, un promotor del crecimiento y/o desarrollo, un impulsor... (a fin de cuentas en muchas organizaciones se utiliza la formación como herramienta de motivación), pero más allá de que el curso salga bien, los asistentes participen, se cubran los objetivos formativos... hemos de procurar "plantar semillas".

Es difícil cambiar viejos hábitos en actitudes y/o comportamientos si no acompañamos esta formación o esta intención de cambio de un plan de acción; lamentablemente, éste no es suficiente, necesitas el compromiso y la inquietud personal por lograr ese cambio. En realidad, necesitas: Introspección, Voluntad y Compromiso.

Introspección para conocerte y saber dónde están tus puntos fuertes y puntos débiles, Voluntad para querer cambiar y Compromiso para mantener el esfuerzo y llevar a cabo tu plan de acción personal.

Los cambios actitudinales y/o comportamentales pueden venir inspirados por personas que pueden ser figuras de transición, por formación, por conocer nuevas formas de hacer las cosas y / o cambiar nuestros paradigmas, pero nadie puede obligarnos a cambiar, nadie lo va a hacer por nosotros, así que depende de nosotros marcarnos el nuevo horizonte o sinfín de nuestro éxito. Somos nosotros mismos los motores de nuestro desarrollo.

Por eso, para finalizar los cursos me gusta la siguiente reflexión de Unamuno:

«…Mi empeño es, ha sido y será que los que me lean piensen y mediten en las cosas fundamentales, y no ha sido nunca el de darles pensamientos hechos. Yo he buscado siempre agitar y, a lo sumo, sugerir más que instruir. No vendo pan, sino levadura».

Espero haber podido ser esa semilla... sé que sí, a fin de cuentas... "Un viaje de mil millas, comienza sólo con un paso..." y a veces, sólo el hecho de que se reflexione y se de uno cuenta que hay más opciones posibles y que no hay soluciones únicas (cuando se habla de relaciones interpersonales y/o habilidades...) es el principio para el cambio del paradigma y la necesidad de cambiar.

lunes, 22 de noviembre de 2010

I'm singing in the rain

Podría ser cualquier día de la semana, pero parece que los Lunes nos encontramos mucho más necesitamos de un "empuje" que nos haga llevar la semana con más energía.

Personalmente y después de un par de meses de viajes, trabajo y mucho trabajo (no me puedo quejar...) hoy en lugar de compartir una lectura, una técnica o una reflexión... quería compartir un trocito de vídeo de un episodio de una serie que a mi me levanta el ánimo y hace que una sonrisa se me quede en la cara...

Sin más... os dejo con una muestra... Os deseo una feliz semana :)

martes, 12 de octubre de 2010

La excelencia interpersonal, cada día que pasa, un deber como trabajadores y como personas


Cuántas veces habremos oído frases como: “es un excelente profesional”, “es una excelente persona” o incluso “es un excelente amig@”...


Una de las cuestiones a abordar antes de tratar un término tan sujeto a interpretaciones, es ¿qué es ser Excelente?, depende a quien tomemos como punto de partida y en función de los niveles de exigencia, propios e impuestos, podemos hablar de términos muy diferentes.


La RAE define el término Excelencia como: “1.- Superior calidad o bondad que hace digno de singular aprecio y estimación”


En las empresas podemos hablar de trabajadores excelentes, ¿pero realmente tenemos claro qué es lo que significa? ¿Qué repercusión tiene a nivel competencial? Hablar de términos que sugieren un valor máximo de competencia puede llevar connotaciones diferentes en función del entorno.


Hoy por hoy, trabajar en una organización no sólo significa cumplir tus objetivos y tener un buen desempeño, sino relacionarnos y trabajar con gente; de hecho, ya estamos cada vez más mentalizados: trabajamos con clientes internos para clientes externos y que todos interactuamos, ya que los procesos son transversales y somos parte de una gran red.


S. Covey estudió los rasgos del carácter que presentaban las personas que tenían éxito y de ahí logró definir los “7 Hábitos de las personas altamente efectivas” como objetivo de desarrollo.


Para calificarnos como excelentes, a nivel interpersonal, hemos de marcarnos como principal objetivo identicar las claves para conocer, formar y afianzar una red de relaciones adecuada a nuestros objetivos profesionales y las habilidades necesarias para ello.


Asertividad, comunicación, la conciencia autocrítica,… conceptos que hasta el momento se han trabajado desde el desarrollo personal, hemos de plantearnos desde el punto de vista requerido para la excelencia en el desempeño de cualquier puesto.


Además elemento complementario para calificarnos como excelentes, hemos de tener en cuenta la influencia como capacidad de negociación, siempre partiendo desde la cooperación (no en el sentido negativo de la manipulación)


Todo esto supone un ejercicio de autoconocimiento, no sólo de los objetivos profesionales, sino también de nuestra posición dentro de la organización. Hemos de conocer no sólo cuál es nuestra misión, nuestros objetivos y quién/nes de nuestra organización y fuera de ella participan en este complejo proceso.


Partiendo de ese punto, necesitamos capacidad de autocrítica para analizar consecuencias y asumir retos, ser asertivos y firmes en nuestras relaciones y decisiones, teniendo claros nuestros objetivos. Lo importante es la creación de relaciones establecidas con la base de la confianza, de la cooperación, del ganar – ganar.


La clave es la comunicación, aprender a comunicarnos con un objetivo y como ese objetivo puede ser retroalimentado por todos los que puedan participar en un proceso organizativo y / o proyecto.


domingo, 26 de septiembre de 2010

Cómo ver un problema... y ser capaz de ver más de una solución


Después de una semana intensa y llena de debates, me parece interesante recordar una técnica para el análisis de problemas del doctor Edward de Bono.

Ya hace unos cuantos post comentaba la capacidad que tenemos en ocasiones de limitar nuestro enfoque de pensamiento por nuestros propios "mapas del mundo", paradigmas subjetivos que utilizamos para interpretar lo que vemos y que nos sirven de base para solucionar los problemas a los que nos enfrentamos.

En muchas ocasiones, esto en lugar de facilitarnos el análisis, nos limita, porque la visión o el enfoque que tenemos del problema es limitada y aunque encontremos una solución que nos pueda servir no tenemos garantizado que sea la mejor o la más adecuada.

Por este motivo, el doctor de Bono ideó una sencilla práctica que consistía en tratar de analizar el problema desde una posición determinada, teniendo en cuenta que existen 6 posiciones distintas y complementarias que nos van a ayudar a conocer de forma casi asegurada toda la dimensión del problema y que contactan directamente con nuestro estado emocional al respecto del problema ("los 6 sombreros para pensar").

Se identifican seis estados/ posiciones distintas:
  • Neutralidad (Blanco) Considerando puramente qué información está disponible, ¿Cuáles son los hechos?
  • Sentimiento (Rojo) Reacciones viscerales instintivas o declaraciones emocionales (pero ninguna justificación)
  • Juicio negativo (Negro) Lógica aplicada a identificar defectos o barreras, buscando "lo que no casa".
  • Juicio positivo (Amarillo) Lógica aplicada a identificar beneficios, buscando armonía.
  • Pensamiento creativo (Verde) Informaciones de provocación e investigación, viendo a dónde nos lleva un pensamiento.
  • Proceso de control (Azul) Pensando sobre el pensar.
Para que sea más visual, se identificó cada estado con un color, y cada uno de ellos como si fuera un sombrero distinto para que pudiera ser más fácil adoptar ese estado a través de la colocación de un sombrero en nuestra cabeza.

Ojalá, y aprovechando que los sombreros están de moda, fuera más común esta práctica y nos permitiera no sólo analizar los problemas de una forma más completa, sino incluso facilitaría en más de una ocasión compartir puntos de vista y porqué no, generar acuerdos mucho más sólidos.
Foto sacada de chalo84 de flickr. Más info en el libro "Seis sombreros para pensar" de Edward de Bono

viernes, 17 de septiembre de 2010

Todos tenemos un "superpoder"


La verdad es que la "vuelta al cole" ha sido un poco más ajetreada de lo previsto, en cierto modo facilita a que rápidamente entres en la rutina y las vacaciones queden cada vez más lejos.

Esta semana ha sido un poco caótica, llena de proyectos nuevos, cursos para preparar con nuevos itinerarios pedagógicos, jornadas de sensibilización, etc... supongo que estos son parte de los motivos por los cuales esta semana he tenido un extraño sueño, y es que hace dos o tres noches soñé que tenía superpoderes, bueno más bien, un superpoder, pero a lo largo del sueño no lograba saber cuál era; el caso, es que más allá del contenido del sueño, que como suele pasar, los elementos que recuerdas son inconexos y a veces incoherentes (mis compis tuvieron oportunidad de reirse un rato ...) he tratado de ir más allá de todo esto, y me ha ofrecido la siguiente interpretación del mismo: todos tenemos un superpoder, aunque en ocasiones tenemos nuestras dudas y nos invaden nuestras inseguridades. Es momento de desarrollar nuestra autoconfianza.

En los momentos en los que posiblemente más perdido estés, debido a la gran cantidad de trabajo, diferentes cosas que hacer, actividades heterogéneas, hitos consecutivos, etc... es todavía más importante el tener presente a tu "superpoder", es decir, todos tenemos una habilidad especial, todos sabemos hacer algo donde nos sentimos seguros porque se nos da bien y nos puede servir como punto de apoyo para poder aferrarnos y frenar un posible hundimiento, canalizando nuestra energía de forma positiva.

Cuanta más carga de trabajo tengamos y más cosas diferentes tengamos que hacer, más posibilidades tenemos de perdernos en el camino, no sólo por el cansancio físico que nos supone sino porque acabamos agotados mental y emocionalmente debido al esfuerzo que estamos poniendo.

Así que como mensaje para el fin de semana... ¿tú tienes claro cuál es tu "superpoder"? ¿lo pones en práctica?... y... ¿a qué estás esperando?

viernes, 3 de septiembre de 2010

"Welcome to the real World"


Vuelta al trabajo y vuelta al mundo 2.0!! Me he permitido tomar la frase que Morpheo le dice a Neo en Matrix para representar precisamente ese momento tan crucial en nuestras vidas como la vuelta de vacaciones...

Estamos en la primera semana hábil del mes de septiembre donde muchos de nosotros nos incorporamos al trabajo después de unos cuantos días de asueto estival.

Supongo que más de uno y más de dos, ya no en el primer día, sino en esos primeros días en los que el madrugar se hace casi una montaña y la jornada se hace larga; son esos días en los que tienes la opción de elegir:

- Pastilla Roja: me autosugestiono de lo bien que estaba de vacaciones y soy consciente de cada hora que pasa y lo que estaría haciendo a esas horas tan solo una semana antes...
- Pastilla Azul: asumo que estoy en el mundo real, que vuelvo a tener una actividad programada y trato de ponerme al día de forma progresiva...

Qué lástima no tener un Morpheo que nos diga y nos muestre que es lo que tenemos que hacer en esos primeras días y saque automáticamente todo lo necesario para poder desempeñar nuestro día a día... y poder elegir la pastilla Azul.

La clave: plantearnos objetivos progresivos, cumplir los pequeños hitos que nos vayamos marcando y sobre todo no nos agobiemos si nos encontramos cansados.... nuestro cuerpo y nuestra mente seguro que no tardan en acostumbrarse, a fin de cuentas... todos tenemos un tempo ya que todos no podemos ser "el elegido".
Feliz vuelta al trabajo... aunque yo estoy encantada con que hoy sea viernes y empezar mi primer fin de semana después de.

viernes, 23 de julio de 2010

Trabajando nuestro círculo de influencia...


Bueno, ya que en la "mini" encuesta aparece como tema más votado la actualidad... en el post de hoy hablaremos de un concepto que trabajamos en la conferencia de ayer sobre los 7 hábitos en la Universidad de Alicante: el círculo de influencia y el círculo de preocupación.

Forma parte del primer hábito, el de la Proactividad, que trabaja sobre nuestra libertad de elección. En este caso tiene que ver con las acciones que elegimos realizar con respecto a las cosas que nos preocupan.

Cuando hablamos del círculo de preocupación, en él podríamos poner todo lo que nos preocupa, todo lo que nos ocupa tiempo y nos afecta de algún modo. La pregunta que nos debemos hacer es si ¿hacemos algo al respecto?, porque en función de nuestra capacidad para poder hacer algo iremos pasando del círculo de preocupación al círculo de influencia, será cuando pasemos de perder el tiempo en preocuparnos, pasemos a invertirlo en ocuparnos.

¿Eso significa que no debo preocuparme por aquellas cosas en las que no tengo opción de intervenir? ¿He de dejar de preocuparme por el hambre en el mundo o por la capa de ozono?, no; significa que no he de centrar la mayor parte de mi tiempo en preocuparme por cosas en las que no hago nada al respecto.

Es posible que sienta que yo sólo no puedo combatir el hambre en el mundo, pero sí que puedo elegir sobre aquellas acciones que puedan ser como un grano de arena que poco a poco haga que sienta que estoy haciendo algo, que mi aportación, dentro de mi ámbito de actuación, es importante.

Pensar que, si únicamente nos centramos en aquellas cosas que nos preocupan pero tenemos la sensación de que no podemos hacer nada... cuanto más grande es nuestro círculo de preocupación,... más grande es nuestra sensación de impotencia, frustración e incluso nuestra implicación para hacer casi cualquier cosa será baja porque seremos "esclavos" de nuestro entorno, los demás y lo que nos rodea decidirán por nosotros cuáles serán nuestras acciones y por tanto, nuestros resultados.

Cuanto mayor sea nuestro círculo de influencia, mayor sensación de control sobre la consecuencia de mis acciones tendré y sobre todo seré protagonista de mis logros.

La clave es que si algo me preocupa, en lugar de quejarme, en lugar de pensar que no puedo hacer nada,... he de pensar ¿qué es lo que puedo hacer? en algunos casos mi aportación será mucho mayor y con un efecto más directo sobre mis resultados, y en otros casos, será de menor impacto, pero siempre será mi elección.

Si lo llevamos a nuestra vida personal y/o profesional... a veces nos preocupa el tener una mala relación con una persona determinada o que nos estemos quejando continuamente de nuestra empresa o de cómo funcionan las cosas en algo en concreto... protestar, quejarse,... no nos lleva a ningún destino que no sea la frustración y al crecimiento de nuestro círculo de preocupación.

He de elegir qué he de pasar a mi círculo de influencia... o incluso y porqué no, qué sacar de mi círculo de preocupación. Pensar que si está allí es porque me preocupa y sin querer estoy invirtiendo tiempo y energía generándome un estado emocional positivo o negativo... según esté ampliando o encogiendo mi círculo de influencia...

sábado, 17 de julio de 2010

La amistad ... o aquello que nos gustaría entender por amistad


Bueno, después de pasar todo el día del Sábado en casa, descansando, desconectando y también porqué no, pensando en sobre qué iba a escribir... después de la estupenda noche de ayer he pensado en un post dedicado a la amistad y pequeñas reflexiones sobre ella.

Para comenzar el post, os dejo dos frases que podrían servir como punto de partida:
  • En la prosperidad nuestros amigos nos conocen, en la adversidad los conocemos a ellos (John Churton Collins)
  • La amistad sólo podía tener lugar a través del desarrollo del respeto mutuo y dentro de un espíritu de sinceridad (Dalai Lama)
Estas dos frases podrían resumir lo que seguro que todos entendemos por amistad: por un lado el respeto mutuo y la sinceridad que le pedimos a alguien que dice llamarse amigo nuestro y por otro lado, todos tenemos claro que en los malos momentos es cuando descubrimos quién es realmente amigo.

¿Podemos tener amigos en el trabajo? la respuesta que yo daría es que debemos tener amigos. Evidentemente hay diferentes niveles de amistad, en términos de Covey podríamos asemejarlo al concepto de cuenta bancaria emocional porque todos tenemos una cuenta con cada persona con la que nos relacionamos; en función de las interacciones que tengamos éstas: pueden ser depósitos, reintegros o incluso operaciones neutras, teniendo como resultado la calidad de ésta amistad. Debemos de tener en el trabajo, sino amigos, desde luego personas en las que confiar, en quien podamos apoyarnos por lo menos en términos laborales y con quien podamos contar en los momentos difíciles.

La calidad de nuestra estabilidad emocional, va a depender de la calidad de nuestra red social (familia, amigos, trabajo, etc)

Y ahora pensemos en nosotros ¿qué les exigimos a nuestros amigos? está claro que la amistad hay que cuidarla, pero no por más numerosos sean los contactos la amistad será más profunda. Hay que ser sensatos y sobre todo maduros, en más de una ocasión he visto reacciones de instituto pasados los 30....

Amigos de verdad... los podemos contar con los dedos de una mano y son aquellas personas que aunque no las hayamos visto desde hace tiempo, sabes que están ahí, para cuando las necesites y en el grado en que las necesites.

Amigos de verdad son aquellos con los que te puedes tomar un café y no estar necesariamente hablando.... a veces con una mirada es suficiente.

Fotografía de Victor Nuno vía Flickr

martes, 13 de julio de 2010

El Pulpo Paul y la profecía autocumplida


Bueno, bueno, bueno... después de la embriaguez de algunos, del aprovechamiento televisivo de otros y de las reflexiones sobre el liderazgo y el trabajo en equipo realizado por la selección en el mundial, se me ocurre que se puede analizar cómo ha afectado el pulpo Paul en el resultado sino de la selección, seguro que sí de la afición.

Siempre que comienza una competición deportiva en la cual interviene algún equipo / jugador español... en un primer momento puede haber un momento de subida, de entusiasmo colectivo apostando por un buen resultado, pero a la mínima de un error... (dícese de un partido contra Suiza, por ejemplo) volvemos al.... "otro año igual", "no llegaremos ni a cuartos", etc... seguro que los jugadores están más que acostumbrados a lidiar con estos malos augurios o la baja confianza por parte de la afición en estos momentos (o por lo menos deberían).

Este año, creo que la selección ha tenido la ayuda moral del pulpo Paul, no porque a ellos les afectara directamente a su motivación, pero sí que a la afición con más o menos sorna y cachondeo, le daba garantías de éxito, que a su vez proyectaban en la ilusión y motivación del equipo, estando seguros de su resultado.

Esto quizás hace plantear que tanto pulpo por aquí y tanto pulpo por allá, haya tenido un efecto colateral, que es actuar como una profecía autocumplida.... concepto que tal y como dice el Teorema de Thomas: "If men define situations as real, they are real in their consequences", es decir, si una situación es definida como real, esa situación tiene efectos reales.

Queramos o no el pulpo ha colaborado, sino en la selección, seguro que en la afición,... y por ende... en el resultado... ¿o no?¿y ahora que? ¿nos lo comemos?

viernes, 9 de julio de 2010

¿Existen los vampiros? o sólo es que no los vemos...


Aprovechando que hace algo más de una semana se estrenó la tercera parte de la famosa saga de Crepúsculo, y que todo el mundo está como loco con los vampiros, quiero haceros la siguiente pregunta ¿creéis que los vampiros existen? ¿están a nuestro alrededor y no los identificamos?, probablemente penséis que algo raro me pasa o que la pregunta no debe de ser en serio... pero la verdad, es que los vampiros existen y están a nuestro alrededor, la cuestión es que no beben sangre como los de la literatura, pero sí que se nutren de nuestra energía vital y nos transmiten tensión...

En realidad esto forma parte de un juego, una técnica que me enseñó un amigo (@moriwanka ) y que nos sirve para calcular o hacer un balance de cómo está nuestra cuenta de energía emocional; y es que hay veces que nos damos cuenta que el estar en contacto con determinadas personas, nos da energía, o nos la quita o incluso nos genera tensión.

Tenemos que identificar los tres roles de energía emocional de nuestro entorno:

- Ángeles.- son aquellas personas que nos ayudan a descargar la tensión, nos aportan energía y están a nuestro lado cuando los necesitamos.
- Chupópteros.- éstos nos absorben la energía, hablan sólo de sus problemas y te utilizan cual cargador.
- Vampiros.- no sólo nos absorber energía, sino que transmiten tensión y nos cargan de energía negativa.

Hemos de tener claro que no son estilos puros, es posible, que dentro de nuestro círculo tengamos personas que se muevan entre varios roles, aunque sí que podemos ver una tendencia a actual con un rol determinado.

Hemos de valorar nuestras relaciones diarias, cuántos ángeles, chupópteros y vampiros nos rodean y cómo está nuestra cuenta emocional.

Los ángeles neutralizan a los vampiros, y con los chupópteros hemos de emplear nuestra asertividad para que no nos absorban energía cuando ellos quieran, sino cuándo nosotros estemos dispuestos.

En función de nuestra cuenta emocional, estará nuestra autoestima, automotivación, autoconcepto, energía ..... etc... tan fundamentales en nuestra vida diaria.

Y ahora os vuelvo a hacer la pregunta ¿existen los vampiros? y ¿cuántos son los que nos rodean?

Imagen sacada de Galería de RUDEWORKS (Flickr)


domingo, 4 de julio de 2010

Libros de ayer y de hoy...


Este fin de semana me he vuelto a leer un libro que tenía pendiente desde hace tiempo. El libro es el de Momo, de Michael Ende, seguro que el que más y el que menos se lo ha leído alguna vez en su infancia...

Yo recomendaba su lectura, no sólo por los recuerdos que tenía, sino también porque es un libro que cada vez que lo lees, cada persona le da una lectura y una interpretación diferente.

Es un libro, que, cuando lo terminas, te da la sensación que habla del tiempo y de la presión que sentimos por "ahorrar tiempo", sin embargo, es un libro que va más allá, que habla del valor de la amistad, del valor por saborear cada momento, de la percepción que tenemos del tiempo y que sobre todo "Porque el tiempo es vida. Y la vida reside en el corazón".

Uno de los trocitos más bonitos e interesantes es la conversación que tiene Momo con el Maestro Hora:

¿qué “es” el tiempo, de verdad? —Si acabas de descubrirlo tú misma —le contestó el maestro “Hora”. —No —dijo Momo—, quiero decir el tiempo mismo. Tiene que ser una cosa u otra. Existe. ¿Qué es en realidad? —Sería bonito —contestó el maestro “Hora”— que también a esto pudieras contestar tú misma.
Momo reflexionó largo rato.
Está ahí —dijo, hundida en sus pensamientos—, eso es seguro. Pero no se le puede tocar. Ni retener. ¿Acaso sea algo parecido a un olor? Pero también es algo que siempre pasa. Así que tiene que venir de algún lugar. ¿Acaso es algo así como el viento? O no. Ya lo sé. Quizá sea una especie de música que no se oye porque suena siempre. Aunque creo que ya la he oído alguna vez, muy bajito.

Es interesante el ver como nos podemos identificar con los diferentes personajes de la novela, y de cómo nos influyen los pensamientos automáticos, negativos o positivos, que se pueden representar por los hombres grises o por el maestro Hora, respectivamente; aunque claro, esto no deja de ser mi interpretación del libro... yo os invito a leerlo y os animo a que saquéis vuestras propias conclusiones.

martes, 29 de junio de 2010

Sueños Semilla


Después de una semana... quiero dedicar este post a una amiga que no está pasando por un buen momento y que quizás como en alguna ocasión todos nos hemos podido sentir de forma similar, quiero compartir un cuento de Jorge Bucay que me alienta de esperanza en los momentos de bajón y me ayuda a seguir adelante.

El cuento es "Sueños de Semilla", del libro Cuentos para Pensar. Probablemente, cuando uno lo lea podrá tener una versión distinta, otra visión o perspectiva, al fin y al cabo cada uno de nosotros somos un árbol diferente,...

Para mí significa, que, aunque en ocasiones te sientas frustrado, no confíes en ti mismo y posiblemente te entre el desaliento... dentro de tí está el camino, en lo más profundo de tu ser sabes qué es lo que tienes que hacer y hasta dónde puedes llegar... a veces necesitas ayuda, por supuesto, de tus amigos, de conocidos, de un aprendizaje, de una reflexión, ... como un árbol necesita ayuda del sol, del agua, del aire... pero siempre, siempre,... esa semilla encuentra un camino para crecer y llegar a ser árbol, tal y como nosotros seremos la persona que vemos en nuestro interior que podemos ser.

Del libro "Cuentos para pensar"

En el silencio de mi reflexión
percibo todo mi mundo interno
como si fuera una semilla,
de alguna manera pequeña e insignificante
pero también pletórica de potencialidades.
...Y veo en sus entrañas
el germen de un árbol magnífico,
el árbol de mi propia vida
en proceso de desarrollo.

En su pequeñez, cada semilla contiene
el espíritu del árbol que será después.
Cada semilla sabe cómo transformarse en árbol,
Cayendo en tierra fértil,
absorbiendo los jugos que la alimentan,
expandiendo las ramas y el follaje,
llenándose de flores y de frutos,
para poder dar lo que tienen que dar.

Cada semilla sabe
cómo llegar a ser árbol.
Y tantas son las semillas
como son los sueños secretos.

Dentro de nosotros, innumerables sueños
esperan el tiempo de germinar,
echar raíces y darse a luz,
morir como semillas...
para convertirse en árboles.

Árboles magníficos y orgullosos
que a su vez nos digan, en su solidez,
que oigamos nuestra voz interior,
que escuchemos
la sabiduría de nuestros sueños semilla.

Ellos, los sueños, indican el camino
con símbolos y señales de toda clase,
en cada hecho, en cada momento,
entre las cosas y entre las personas,
en los dolores y en los placeres,
en los triunfos y en los fracasos.

Lo soñado nos enseña, dormidos o despiertos,
a vernos, a escucharnos, a darnos cuenta.

Nos muestra el rumbo en presentimientos huidizos
o en relámpagos de lucidez enceguecedora.

Y así crecemos, nos desarrollamos, evolucionamos...

Y un día, mientras transitamos
este eterno presente que llamamos vida,
las semillas de nuestros sueños
se transformarán en árboles,
y desplegarán sus ramas que,
como alas gigantescas,
cruzarán el cielo,
uniendo en un solo trazo
nuestro pasado y nuestro futuro.

Nada hay que temer,
...una sabiduría interior las acompaña...
porque cada semilla sabe....
cómo llegar a ser árbol...

viernes, 18 de junio de 2010

... Tiempo de Risas ...

Acabo de volver de Pontevedra, después de una semana de haber estado haciendo descripciones de puestos de perfiles mecánicos para seguir dando un curso de liderazgo para contramaestres del entorno industrial, y sinceramente... estoy agotada... espero el fin de semana con ganas y sobre todo con ganas de desconectar y de reirme.

Supongo que a todos nosotros nos pasa lo mismo, cuando después de una semana intensa tanto a nivel físico como a nivel emocional llega el Fin de Semana y necesitamos nuestro momento de asueto o incluso el poder practicar "risoterapia" a nuestra manera.

... Es el momento de quedar con amigos, de ver una película "aneuronal" o incluso jugar con nuestra mascota. Todo es proponérselo y utilizar estas situaciones tan de nuestro día para "echarnos" unas risas (incluso no puede pasar con los anuncios de la tele.... yo misma este anuncio de MIxta me sirve para reirme cada vez que lo veo...)

Si queremos practicar la risoterapia un poco más en serio, podemos empezar poniéndonos frente a un espejo, empezar y no estar preocupándonos de si nos miran o nos oyen, uno de los mejores sitios es el baño, donde podemos cerrar la puerta sin llamar la atención :)

Una vez allí, comenzamos a "poner caras", gesticular, como si os estuvierais riendo, de forma sonora o sin llegar a soltar carcajadas, ir jugando con vuestra cara.... Cuando llevéis 5' haciendo estos ejercicios... anímicamente estaremos un poco mejor.

La paradoja de las emociones es que podemos provocarlas a través de nuestros pensamientos y de nuestras conductas.... y quizás en estos momentos de cansancio... nos es más fácil gesticular una sonrisa... que visualizar una imagen positiva para tener el mismo resultado.

Ánimo y a reirse... que toca Fin de Semana.

lunes, 14 de junio de 2010

Cuando la sinceridad dejó de ser un signo de respeto


Muchas personas utilizan la frase "la verdad duele" para utilizar lo que ellos consideran como verdad para ser sinceros y criticar al otro a su antojo.

Hay que diferenciar cuando estamos siendo sinceros y cuando estamos abusando de nuestro propio criterio para tratar de imponerlo a los demás.

La clave es diferenciar la sinceridad pensando en el otro y pensando en la mejora continua o la "sinceridad" diciendo lo primero que me viene a la cabeza con el único objetivo de soltar lo primero que me viene a la cabeza sin pensar en lo que digo, ni cómo lo digo, ni mucho menos teniendo en cuanta a la persona que tengo delante. Es importante tener presente que no podemos decir las cosas tal y como nos vienen a la cabeza con el único objetivo de dar nuestra opinión sobre todas las cosas.

¿Esto quiere decir que he de ocultar mis sentimientos o manera de ver las cosas?, ni mucho menos, lo que ocurre es que tengo que pensar en quién se lo digo y cuándo se lo digo.

Ser sincero, dar nuestra opinión sobre algo a una persona, es con el objetivo de querer modificar algo, mejorar la relación, implantar un cambio de conducta, etc... es decir, en resumen, el objetivo de ser sincero sobre algo en concreto para provocar un cambio en nuestro interlocutor, es a través de la crítica constructiva.

Gracias a la sociedad en la que vivimos, y sobre todo gracias a los medios que estamos más que acostumbrados a ver cada día en la TV, no sabemos realizar críticas constructivas, lo único que aprendemos de lo que vemos es el objetivo de interpelar al otro partiendo de nuestro punto de vista y no desde el de nuestro interlocutor. No buscando un acuerdo, sino que en muchos casos se nos de la razón.

Cuando queremos ser sinceros y aportar una crítica constructiva, lo que queremos es ayudar a nuestro interlocutor a adoptar un cambio que pensamos que puede ser positivo para la persona en cuestión. Pensar en realizar una crítica constructiva es tan fácil y tan difícil como realizar un buen regalo; de hecho, si la crítica está bien hecha, es un regalo.

Para que visualicemos cómo hacemos las críticas, lo compararemos a cuando nos corresponde hacer un regalo; para empezar, tenemos que pensar en la persona que tenemos delante, a la cual queremos hacerle ese regalo y que no nos ha de influenciar cómo de bien me puede caer esa persona, sino cuánto la conozco para saber cuál es el regalo más adecuado para la misma.

¿Compramos un regalo pensando en los gustos de esa persona? o ¿lo compramos en lo que me gustaría a mi? o incluso podemos llegar a comprar un regalo que sabemos que finalmente usaremos nosotros...

Pensemos que hemos encontrado el regalo ideal para esa persona (no a todas las personas encajan los mismos regalos, por que todos tenemos gustos diferentes...). Muy bien. ¿Cómo y cuándo se lo damos?

Pensar en la diferencia que supone, que aunque me regalen lo que yo más deseo o necesito, es decir, partiendo del mismo regalo, del mismo contenido, pero:

- Opción A.- me lo entreguen envuelto en un papel de periódico "sucio", arrugado y con mal aspecto y además que sea de sopetón, en un encuentro de pasillo....
- Opción B.- el regalo esté envuelto con un papel delicado, dentro de una caja y en un momento que favorezca la apertura de ese regalo y con un disfrute especial por abrirlo...

¿Cómo preferiríamos que fuera el regalo que nos tocara abrir? obviamente, preferiríamos la situación que más se acercara a la opción B, ¿verdad?

Pues con respecto a la crítica constructiva, al momento de ser sinceros,... tenemos en cuenta los mismos criterios. Hemos de tener en cuenta a la persona, con sus aspectos positivos, intereses y sentimientos, diciéndolo de la mejor manera posible para que la persona no lo tome como una afrenta o como una ofensa, sino como una aportación positiva para su desarrollo y sobre todo... hay que buscar el momento más adecuado, ni en el mismo momento, ni pasados 3 meses, en la misma semana sería un tiempo adecuado para hacerlo.

Finalmente, tengamos presente: los elogios en público... las críticas... personalizadas y en privado. Parece de sentido común, pero... lamentablemente parece ser el menos común de todos los sentidos.

domingo, 13 de junio de 2010

Domingo... Ejercicio de Relajación - Activación


Ya es Domingo. Se acaba la semana y toca preparar la semana siguiente. Este día se combina de una serie de pensamientos y emociones agridulces, porque por un lado, nos queda todo un día para descansar y aprovechar con la familia, amigos, etc... y por otro lado es posible que se nos vaya la cabeza hacia todo lo que tenemos que preparar para el tan cercano Lunes.

Es importante que nos guardemos unos minutos para nosotros, para poder relajarnos y poder preparar la mente para organizarnos la semana que viene o los temas pendientes que tengamos, de otra manera, queramos o no, en algún momento nos vendrán pensamientos a nuestra mente como: "tengo que...", "que no se me olvide ...", "tendría que..." y un sin fin de etc.

Para organizarnos después y tener la mente despejada, os propongo un ejercicio de relajación muy sencillo, lo primero es que busquéis un sitio de vuestra casa, un sitio donde os encontréis cómodos y a ser posible durante 15 minutos (mínimo) podáis estar sin ser molestados. Podéis tumbaros o sentaros con las piernas estiradas, yo os recomendaría la primera opción.

Elegir una música relajante pero con cierto dinamismo (no nos debemos dormir, es una relajación para activarnos), yo os propongo por ejemplo a Sheila Chandra (BSO ESDLA) y de su álbum Weaving my Ancestor's Voices la canción Dhyana and Donalogue, la clave es elegir una música que os guste, si preferís hay opciones Chill Out o con sonidos de la naturaleza que también pueden ser una opción idónea mientras no sea una música conocida. Programaros la música para 10 - 15 minutos (3 - 4 canciones)

Una vez tumbados boca arriba, estiramos las piernas y los brazos, como si estuviéramos en el mar o en la playa (si se necesita, no importa si doblamos las piernas) y nos dejamos llevar por la música.

Si comenzáis a pensar en lo que tenéis que hacer, no tratéis de bloquear esos pensamientos, simplemente dejarlos pasar, concentrar vuestra atención en la música, en cómo vuestro cuerpo está tumbado y cada parte del mismo cómo entra en contacto con el suelo, con la cama, con el sillón o con el lugar dónde estemos relajándonos. Procurar inspirar por la nariz y expulsar el aire por la boca, lentamente, tratando de acompasar el ritmo de vuestra respiración a la música.

Cuando acabe de sonar la música, abrir los ojos, pero no os incorporéis todavía. Disfrutar de ese momento y tomar conciencia de cada parte de vuestro cuerpo. Primero las piernas y los brazos, después el resto del cuerpo y entonces podéis ir levantándoos poco a poco.

Aprovechar ese primer momento con la mente despejada y el cuerpo relajado para anotar en vuestra agenda o en un cuaderno todo lo que queréis hacer en el día de hoy y podáis dejar preparada la organización de la semana siguiente. Os costará menos de 15 minutos y disfrutaréis del resto del Domingo, porque si nuestra mente nos deja.... el tiempo es sólo nuestro.

viernes, 11 de junio de 2010

¿Búho o Alondra? Dime qué eres y te diré como afecta a tu gestión del tiempo



En muchos sitios podemos encontrar diferentes técnicas para gestionar el tiempo: por prioridades, GTD, etc... pero ¿porqué en muchos casos no nos funcionan? sinceramente, porque no somos objetivos con nosotros mismos ni con nuestra propia personalidad.

¿Qué significa ser búho o alondra?... es la representación de nuestro nivel de actividad mental, sobre todo porque no a todas las horas solemos estar igual de despejados y más cuando hay tareas que nos requieren más nivel de atención que otras.

Si somos personas que estamos más concentradas a primera hora de la mañana y que poco a poco nuestro nivel de concentración o actividad baja ... somos alondras.
Si por el contrario, somos de las personas que las primeras horas de la mañana son más duras para tareas que requieran concentración y que por lo menos hasta mitad de la mañana no comenzamos a despejarnos pudiendo mantener nuestro nivel de concentración hasta finalizar el día ... somos búhos.

¿Por qué conocer estas características son relevantes? porque en gestión del tiempo aprendemos técnicas de cómo identificar las tareas que son más relevantes en cada uno de nuestros puestos de trabajo, y a partir de ahí diferenciar la famosa coyuntura: importante vs urgente, pero nos quedamos ahí.

Cuando nos preocupamos por aprender técnicas de gestión del tiempo, no consideramos el aspecto de la personalidad ni de nuestro carácter, y nos molestamos en adquirir libros, técnicas e incluso aparatos electrónicos que faciliten nuestra gestión del tiempo sin considerar nuestro carácter, nuestro entorno, nuestras habilidades.... sin darnos cuenta que sin tener en cuenta todo lo que nos rodea y sin considerar nuestro entorno estamos comprando las fichas que nos harán con probabilidad fracasar en el intento de gestión de nuestro tiempo volviendo sin remedio a la rutina de salvar el día a día como se pueda.

No sólo he de identificar qué es lo más importante de nuestras responsabilidades laborales (e incluso personales), sino por supuesto asignarle la urgencia que hará más fácil la priorización de las mismas; además he de tener en cuenta, que a la hora de programar esas tareas ya priorizadas en mi día a día, he de tener en presente mi capacidad de concentración y mi bioritmo para poder ubicar las tareas importantes en los momentos en que mi mente se encuentre más despejada para poder dedicarle la atención necesaria y eso salvo excepción (todos tenemos días en los que estamos más obtusos) lo podemos prever conociendo mi flujo de actividad mental.

A la hora de elegir la herramienta más adecuada para ayudar a gestionar mi memoria (no todo lo aguanta una lista o una ristra de post-it) he de considerar aquella herramienta que me facilite la gestión, por mi personalidad y entorno laboral, eligiendo una agenda de papel, una PDA (o sistema similar), el Outlook, etc... en función de lo que me sea más cómodo, asequible y operativo (pensando siempre en cual será el sistema que me sea más fácil de mantener actualizado)

Para terminar de encajar todas estas piezas del puzzle, he de conocer también los flujos de trabajo de mi actividad diaria (para evitar los famosos cronófagos o ladrones del tiempo) así como ser consciente de que todo proceso de adquisición de una habilidad conlleva un esfuerzo y requiere una perseverancia para que se convierta en un hábito.

Como dijo Elbert Hubbard: "Cultiva solo aquellos hábitos que quisieras que dominaran tu vida".

jueves, 10 de junio de 2010

Para motivar a los demás, primero descúbrete a ti mismo


Siempre que se plantea el tema de la motivación, se parte desde el mismo enfoque: "Quiero motivar a mi equipo para que rinda más, sea más productivo y estén más a gusto".

Muy bien, pero para conseguir esa meta, tengo que tener presente que antes de hacerme responsable de las inquietudes de mis colaboradores, he de ser consciente de las mías propias para poder comprender qué necesito yo y el proceso que me va a llevar a mantener ese esfuerzo (y así comprender a los demás) para lograr ese objetivo.

Muchas veces confundimos motivación con deseo. Deseos son los que nos marcamos a principio de año, es decir, aprender inglés, ir al gimnasio, dejar de fumar (el que fume...),... pero ¿cuánto tiempo me dura esta intención? ¿hasta el 15 de Enero?, ¿1 de Febrero?, ¿2 de Enero?... y cuando no lo logro pienso.... claro, es que no estoy motivado.

Hemos de pensar que para que algo me motive, ha de cubrir una necesidad, una necesidad que para mí sea lo suficientemente importante como para mantener el esfuerzo y pueda ser consistente en el tiempo.

Cuando tenemos un equipo que depende de nosotros, es fácil que comencemos con nuevas iniciativas, con muy buenas intenciones y con el fin de satisfacer a todo mi equipo, pero... ojo!!, hemos de ser conscientes de que siempre va a haber alguien que no le guste el cambio o la iniciativa que proponemos y hemos de ser fuertes para, si creemos en esa acción, perseverar y hacer que sea efectiva (seamos flexibles, pero constantes). El ser humano es resistente al cambio por naturaleza. Asumamoslo.

Por lo que para empezar, he de conocer qué se me da mejor, qué tengo que mejorar y a dónde me gustaría llegar y llevar a mi equipo. A partir de ahí, focalicemos nuestra atención en ellos.

Como mandos, tenemos dos obligaciones en cuanto a motivación de nuestros colaboradores, una motivarles como equipo, otra tenerlos motivados como personas, como individuos.
Por defecto, nos quedamos en la primera porque pensamos que la única herramienta de motivación para la segunda es la económica.
El dinero es un factor higiénico (teoría de Hertzberg), que me motiva una vez al mes (depende del salario... pero no dura muchos meses ...), los factores propios del trabajo y de las relaciones en el mismo, me pueden motivar o desmotivar los 29 días restantes.

Hagamos un ejercicio y escribamos lo siguiente: ¿Qué más me gusta de mi trabajo? ¿Qué tendría que mejorar? y de ahí nos planteamos un objetivo a corto y otro a medio plazo.

Quizás, si hiciéramos estas preguntas a cada uno de nuestros colaboradores, tendríamos la información que necesitamos, y si no es suficiente,... seguimos buscando... como nos decían los yogures de DANONE.

miércoles, 9 de junio de 2010

Crisis, selección y candidatos. Cuestiones del ahora y del mañana


Esta semana hemos presentado por tercera vez a un candidato como finalista a un cliente (el 3º por el que pasa), hay que decir que no nos dedicamos al "outplacement", pero somos personas que consideramos que un buen candidato es un buen candidato y por eso es finalista.

El caso es que en muchos medios aparecen noticias sobre la crisis, el desempleo, las empresas.... pero las personas que se encuentran buscando trabajo en estos medios, en muchas ocasiones se quedan con la foto de la cola del INEM.

Hay algo más que la cola del paro, hay un trabajo diario de búsqueda y un trabajo diario para no caer en la desesperación.

Lo que me preocupa, es que los candidatos no sólo tienen que superar el primer filtro (esos psicólog@s malísimos de la muerte que somos los que vamos a tratar de buscar todos sus secretos y preocupaciones ocultas,... entiéndase esto como una metáfora irónica de la situación); sino que además tienen que pasar el siguiente filtro que es otra persona, quizás no tan sensibilizada con los recursos humanos.

La cuestión es que nosotros diferenciamos la ansiedad estado de la ansiedad rasgo, es decir, de la ansiedad o el nerviosismo generado por la situación de inestabilidad transitoria que genera el desempleo de la ansiedad que sugiere inestabilidad emocional; sin embargo, cuando tu presentas tres candidatos (es indistinto que se presenten a nivel interno como presentados por una consultora externa) al Director/a del Departamento / Área y no sabe distinguir esta cuestión, normalmente se interpretan estos signos de nerviosismo como inseguridad, y por tanto de incapacitación para desempeñar ese puesto de trabajo.

Llegados a este punto, creo que personalmente nos toca "enseñar" al candidato a modular estos indicadores y "enseñar" al cliente a ampliar sus puntos de mira.

¿Por qué? porque lamentablemente cada vez será más frecuente encontrarnos a gente en desempleo buscando trabajo para cualquier tipo de puesto (directivo, mando intermedio, técnico cualificado, ...) incluso en aquellos puestos en los que no era tan corriente encontrarte gente en paro y te encontrabas con la premisa del cliente (interno o externo) que quiere una persona que se encuentre trabajando. Ahora no podemos decir: si está en desempleo no lo quiero. No es justo, ni coherente, ni tiene sentido (no lo tenía antes en muchas de las ocasiones.... )

Creo que deberíamos replantearnos el enfoque de estas entrevistas y profesionalizarlas desde el principio hasta el final, que haya siempre alguien de RRHH acompañando a todas las fases del proceso para discernir aquellos aspectos de la personalidad o de la conducta que puedan ser malinterpretados, para poderle dar a cada candidato una oportunidad y ser justos y objetivos en esa selección.

Ganarán los candidatos, porque su meta se habrá cumplido y podrán ver recompensados sus esfuerzos.
Ganarán las empresas, porque tendrán empleados, colaboradores, mandos,... con ganas de trabajar y de aportar desde el principio (además del consiguiente agradecimiento por la oportunidad).
Ganaremos todos, porque esa es la cuestión... que el pensar en ganar - ganar no sea algo de unos pocos sino que forme parte de nuestra cultura.